El acuerdo para sacar cereales de Ucrania, en las sombras por un ataque a Odesa
El acuerdo firmado este viernes entre Rusia y Ucrania para reanudar la exportación de cereales bloqueada por la guerra pareció entrar en una zona de incertidumbre a partir de la denuncia de Kiev de que varios misiles rusos impactaron contra el puerto de Odesa, sobre el mar Negro, clave para la implementación del entendimiento, en un hecho repudiado casi unánimemente por occidente.
“El enemigo atacó el puerto marítimo de Odesa con misiles de crucero Kalibr. Dos de los proyectiles fueron derribados por las fuerzas de defensa aérea. Dos impactaron en la infraestructura portuaria», señaló Sergii Brachuk, un vocero de la región de Odesa, en un comunicado difundido en las redes sociales.
En un video publicado en Telegram, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó: «Esto prueba solo una cosa: no importa lo que Rusia diga y prometa; encontrará formas de incumplirlo».
Los dos países en guerra firmaron en Estambul un acuerdo mediado por la ONU y Turquía que permite la reanudación de las exportaciones de granos ucranianos y de cereales y fertilizantes rusos, en busca aliviar la crisis alimentaria global desatada por la guerra.
El diputado Oleksiy Goncharenko había informado antes que hubo seis explosiones en Odesa y que se registró un incendio en el puerto. Según el diputado, el ataque dejó víctimas, aunque no dio a conocer cuántas, informó la agencia Europa Press.
La agencia Ansa, en tanto, habló de 9 heridos y ningún muerto.
La vía de salida de los granos, bajo ataque
«El puerto de Odesa fue atacado específicamente cuando cargamentos de cereales estaban siendo procesados. Dos misiles impactaron las infraestructuras del puerto, donde por supuesto hay grano. Atacaron un territorio donde se encuentra el grano», agregó el vocero militar Yuriy Ignat, citado por la agencia de noticias AFP.
El presidente ruso, Vladimir Putin, «escupió en la cara del secretario general de la ONU, António Guterres, y del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que hicieron enormes esfuerzos para alcanzar este acuerdo», agregó el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Oleg Nikolenko.
El funcionario ucraniano aseguró, además, que Rusia deberá asumir «toda la responsabilidad» si fracasa el acuerdo y se profundiza «la crisis alimentaria mundial».
Los misiles alcanzaron también al Museo de Bellas Artes de Odesa, indicó en Telegram, por otra parte, el ministro ucraniano de Cultura, Oleksandr Tkachenko, según Ukrinform.
En tanto, el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, dijo que Rusia le aseguró a su país que no está implicado en el ataque a Odesa.
«Los rusos nos dijeron que no tenían absolutamente nada que ver con el ataque y que estaban estudiando la cuestión muy de cerca», señaló Akar, con la única palabra del lado de los supuestos atacantes, ya que no hubo pronunciamiento oficial.
La ONU y la Unión Europea también reaccionaron de inmediato al ataque.
Guterres lo condenó «inequívocamente» y enfatizó que «la plena aplicación (del acuerdo) por la Federación Rusa, Ucrania y Turquía es imperativa».
En la misma línea, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, tildó «reprobable» al bombardeo.
«Golpear un objetivo crucial para la exportación de granos un día después de la firma de los acuerdos de Estambul es en particular reprobable y de nuevo demuestra el total desprecio de Rusia por el derecho y los compromisos internacionales», escribió Borrell en Twitter.
Bloqueo a la exportación
Kiev asegura que más de 20 millones de toneladas de granos se encuentran bloqueados en Ucrania por la invasión rusa, que este domingo cumple cinco meses.
En virtud del acuerdo firmado el viernes, personal turco, ucraniano y de la ONU tiene previsto supervisar la carga de granos en los buques en los puertos ucranianos de Odesa, Chernomosk y Pivdenyi, antes de navegar por una ruta planificada previamente a través del mar Negro. El objetivo es que viajen hacia el Mediterráneo a través del estrecho del Bósforo, en la ciudad turca de Estambul, y de allí a los mercados mundiales.
El pacto establece que rusos y ucranianos se comprometían a suspender cualquier ataque contra los barcos o los puertos que participen en estas exportaciones.
El bloqueo de los cargamentos y exportaciones de cereales y fertilizantes rusos impedidas por sanciones internacionales disparó los precios de productos como el trigo y la cebada.
Ucrania es uno de los mayores exportadores mundiales de trigo, maíz y aceite de girasol, pero la invasión de Rusia y el bloqueo de sus puertos detuvieron los envíos al exterior.
El convenio sellado en Estambul es el primer gran acuerdo entre las partes en conflicto desde que comenzó el 24 de febrero la invasión rusa y era esperado con ansias para ayudar a mitigar el hambre que, según la ONU, enfrentan 47 millones de personas adicionales debido a la guerra.
Acaso por si la nueva situación frustra el acuerdo, el ministro ucraniano de Políticas Agrícolas, Nikolay Solsky, afirmó que Ucrania no sólo mira al mar Negro y mantendrá las rutas alternativas utilizadas antes de lo establecido en la negociación con Turquía y la ONU.
«El precio de llevar trigo ucraniano a los puertos de Polonia, de los países bálticos, Rumania y otros países fue alto y sigue siendo alto», pero «esas rutas se mantendrán y desarrollarán, porque siempre debemos tener una alternativa», explicó Solsky.