Putin redobló la ofensiva en Ucrania mientras el mundo debate su reconstrucción
El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó este lunes proseguir la ofensiva en el este de Ucrania tras haber tomado una ciudad clave y la circundante provincia fronteriza con Rusia, mientras una conferencia internacional comenzó a discutir la reconstrucción de Ucrania y la cifró en 750.000 millones de dólares.
Las fuerzas rusas «deben llevar a cabo sus misiones según los planes previamente aprobados», dijo el mandatario ruso durante una reunión con su ministro de Defensa, Serguei Shoigu, transmitida por televisión.
El encuentro llegó un día después de que el Ejército ruso tomara la ciudad de Lisichansk tras semanas de combates y culminara la conquista de la provincia oriental ucraniana de Lugansk, en un logro crucial para los planes de Moscú de apoderarse de toda la región conocida como Donbass.
«Espero que todo vaya bien en su dirección como sucedió en Lugansk hasta ahora», agregó Putin ante su ministro.
Lugansk es una de las dos provincias que forman el Donbass, y su captura representa una importante victoria para el Kremlin más de cuatro meses después del inicio de una ofensiva militar en Ucrania.
Putin también felicitó a sus militares y a las milicias por lo que definió como la «liberación» de dicha región oriental ucraniana, que Moscú reconoce como Estado independiente, y animó a sus tropas a lograr los mismos éxitos en los otros frentes.
En la noche del domingo, el Estado Mayor de las fuerzas armadas ucranianas anunció su retirada de Lisichansk, escenario de encarnizados combates en las últimas semanas, reconociendo la «superioridad» de las tropas rusas.
Lisichansk era pieza central del plan de conquista del Donbass, cuenca industrial y minera mayoritariamente rusoparlante y controlada en parte por los separatistas prorrusos desde 2014.
Ahora, el Ejército ruso concentra sus esfuerzos en la toma de Sloviansk y Kramatorsk, las dos últimas grandes ciudades del Donbass que siguen en poder de Ucrania, ubicadas más al suroeste, en la vecina provincia de Donestk, la otra que forma el Donbass.
Ambas ciudades fueron bombardeadas en los dos últimos días, incluyendo un ataque que ayer dejó 10 muertos en Sloviansk.
Planes de recuperación
En tanto, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó este lunes que la reconstrucción de su país es «la mayor contribución a la paz mundial», durante la apertura de una conferencia de dos días sobre el tema que se celebra en Lugano, Suiza.
«La reconstrucción de Ucrania es la tarea común de todo el mundo democrático» y la «mayor contribución a la paz mundial», dijo Zelenski en un discurso difundido en videoconferencia ante funcionarios de países aliados y de instituciones internacionales, informó la agencia de noticias AFP.
La «tarea es verdaderamente colosal», aunque sólo sea en los territorios liberados, reconoció el presidente ucraniano.
Zelenski no viajó a la reunión, pero sí su primer ministro Denis Shmihal, el presidente del Parlamento ucraniano, Ruslan Stefanchuk; y una delegación de unas cien personas.
El costo de la reconstrucción está estimado en 750.000 millones de dólares, dijo Shmihal, insistiendo en que los activos rusos bloqueados por las sanciones deben ser usados para levantar el país arrasado por la guerra.
La Conferencia de Lugano, prevista mucho antes de que Rusia invadiera Ucrania a finales de febrero, intentará trazar las líneas de la futura reconstrucción del país.
Schmigal y Stefanchuk llegaron a Lugano el domingo, y tienen previsto reunirse con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para sentar las bases del «Plan Marshall» para Ucrania, a pesar de que no se vislumbra el fin de la guerra y las cifras para reconstruir el país oscilan entre decenas y cientos de miles de millones de dólares.
Robert Mardini, director general del Comité Internacional de la Cruz Roja, estimó en la cadena suiza RTS que, aunque la verdadera reconstrucción tendrá que esperar hasta que terminen los combates, es vital dar «una perspectiva positiva a los civiles».
En Londres, en tanto, la canciller británica, Liz Truss, presentó hoy un gran plan de apoyo para ayudar a Ucrania a largo plazo y participar en la reconstrucción del país en cuanto haya terminado la guerra con Rusia.
«La recuperación de Ucrania después de la agresión de Rusia simbolizará el poder de la democracia sobre la autocracia. Mostrará a Putin que sus intentos de destruir Ucrania solo desembocaron en una nación más fuerte, más próspera y más unida», declaró la jefa de la diplomacia británica.
En el plano militar, el Estado Mayor ucraniano, informó este lunes que «el esfuerzo del enemigo (…) se centra en lograr avances progresivos» sobre las líneas ucranianas en Donetsk.
El gobernador de Donetsk, Pavlo Kirilenko, dijo que diez personas, incluidos dos niños, fallecieron ayer en bombardeos rusos en Sloviansk, a pocos kilómetros de la línea del frente.
La ciudad de encontraba casi desierta hoy, salvo en los alrededores de su destruido mercado, después de que las autoridades ucranianas pidieron a la población que abandone la localidad.
«El enemigo ha intensificado sus bombardeos sobre nuestras posiciones en dirección a Bajmut», confirmó el Estado Mayor.
En Jarkov, la segunda ciudad más poblada de Ucrania, en tanto, las autoridades locales informaron de la muerte de tres civiles durante bombardeos en la madrugada del lunes.